El Gran Danés, también conocido como Dogo Alemán, es una raza de perro que tiene sus orígenes en Alemania. Se cree que su historia se remonta a la antigua Grecia y Roma, donde se criaban perros de gran tamaño y robustos para utilizarlos en la guerra y la caza de grandes animales.

Sin embargo, la raza tal como la conocemos hoy en día comenzó a tomar forma en Alemania en el siglo XVII. Fue criada selectivamente por nobles alemanes con el propósito de crear un perro grande y poderoso que fuera adecuado para la caza de jabalíes, ciervos y otros animales de caza mayor.

Su desarrollo consistió en el cruzamiento de perros mastines ingleses y antiguos perros alemanes de caza. A lo largo de los años, se realizaron diferentes cruces y selecciones para refinar el tamaño, la apariencia y el temperamento de la raza.

Durante el siglo XIX, la raza ganó popularidad en Alemania y se le dio el nombre de “Gran Danés” para destacar su elegancia y nobleza. A medida que se fue estableciendo su estándar de raza, se le dio gran importancia a la apariencia, el tamaño y el temperamento equilibrado.

En sus inicios, el Gran Danés como tal tenía una variedad de colores y patrones, pero a lo largo del tiempo se estableció la preferencia por el manto atigrado y el arlequín, que son los colores más reconocidos en la actualidad.

Hoy en día, los perros de esta raza son apreciados como perros de compañía y de exhibición, pero también pueden desempeñarse en deportes caninos y actividades de trabajo. Aunque son conocidos por su tamaño imponente, son perros amigables, afectuosos y gentiles, lo que convierte al Gran Danés en un compañero leal y cariñoso para muchas familias.

¿Cómo saber si mi perro es Gran Danés?

Identificar si tu perro es un Gran Danés puede ser un desafío si no tienes información precisa sobre su origen o antecedentes. Sin embargo, hay algunas características físicas y comportamentales comunes que puedes observar para determinar si tu perro puede serlo o no. Te dejo algunos puntos a considerar:

  1. Tamaño: Los Gran Daneses son perros grandes y robustos. Los machos generalmente tienen una altura de hombro de alrededor de 76 a 86 centímetros y pueden pesar entre 54 y 90 kilogramos. Las hembras son ligeramente más pequeñas pero aún son imponentes en tamaño.
  2. Estructura física: Los Gran Daneses tienen un cuerpo musculoso, con una cabeza grande y alargada. Tienen orejas caídas y ojos expresivos. Su cuello es largo y fuerte, y su pecho es amplio y profundo.
  3. Pelaje y colores: La mayoría de los Gran Daneses tienen un pelaje corto y denso que no requiere mucho cuidado. Los colores más comunes son el atigrado (con rayas o manchas) y el arlequín (manchas grandes en un fondo blanco). También pueden ser negros, azules, manteca o merle.
  4. Temperamento: Los Gran Daneses suelen ser perros tranquilos, amigables y gentiles. Son conocidos por ser afectuosos con sus familias y pacientes con los niños. Aunque su tamaño puede ser intimidante, tienden a ser amigables con extraños y otros animales si están bien socializados desde una edad temprana.

Si tienes dudas sobre la raza de tu perro, lo mejor es consultar con un veterinario o un experto en razas caninas.

¿Es peligroso el Gran Danés?

El Gran Danés no es considerado en general como una raza peligrosa. Sin embargo, como con cualquier raza de perro, el temperamento y el comportamiento pueden variar de un individuo a otro. Es importante tener en cuenta que el Gran Danés es un perro grande y poderoso, por lo que es necesario brindarle una socialización adecuada, entrenamiento y atención responsable para asegurar un comportamiento equilibrado.

Si un perro de esta raza no está debidamente socializado, entrenado o cuidado, pueden surgir problemas de comportamiento o situaciones potencialmente peligrosas. Esto también es válido para cualquier raza de perro, valga nuevamente la aclaración. La socialización temprana y continua, así como la capacitación en obediencia básica, son fundamentales para criar un Gran Danés amigable y bien equilibrado.

Es importante destacar que algunos estados o países pueden tener regulaciones específicas para ciertas razas de perros, incluido el Gran Danés, debido a su tamaño. Es recomendable informarse sobre las leyes y regulaciones locales en caso de tener o considerar tener un perro de este tipo como mascota.

A fin de cuentas, en general, el Gran Danés es conocido por ser amigable, gentil y afectuoso con su familia. Pueden ser excelentes compañeros si se les brinda el cuidado adecuado y se les trata con amor y respeto.

Características del Gran Danés

Esta raza, conocida también como el imponente Dogo Alemán, destaca por cuestiones que ya hemos remarcado, como su estatura impresionante y su elegancia inigualable. En esta sección, nos adentraremos aún más en el fascinante mundo de las características de la raza, explorando desde su imponente físico hasta sus colores y pelajes únicos, mientras desvelamos los secretos de por qué ha dejado una huella tan profunda como raza perruna.

Colores del Gran Danés

Comencemos con el color atigrado, uno de los más comunes en los Gran Daneses. El pelaje atigrado muestra una mezcla de colores, generalmente una base de tonos amarillos o dorados, combinados con rayas o marcas oscuras. Estas marcas oscuras pueden ser negras, marrones o incluso grises. El patrón de atigrado puede variar, desde un atigrado clásico donde las rayas son uniformes y bien definidas, hasta un atigrado moteado donde las rayas se vuelven más irregulares y dispersas.

Otro color prominente en los Gran Daneses es el arlequín. Los perros arlequines tienen un fondo blanco en su pelaje, con grandes manchas negras distribuidas aleatoriamente sobre su cuerpo. Estas manchas negras pueden variar en forma y tamaño, creando un aspecto único en cada perro. Algunos arlequines también pueden tener manchas más pequeñas de otros colores, como gris o marrón, añadiendo aún más diversidad a su apariencia.

Además del atigrado y el arlequín, también hay Gran Daneses de color negro sólido. Estos perros presentan un pelaje negro profundo y brillante en todo su cuerpo, sin marcas adicionales. El negro sólido crea una apariencia elegante y sobria en estos caninos, resaltando su figura imponente.

Otro color menos común pero igualmente fascinante es el azul. Los Gran Daneses azules tienen un pelaje de tonos grisáceos, que puede variar desde un gris claro hasta un gris más oscuro, casi negro. Este color crea una apariencia distintiva y atractiva en los perros, brindándoles una presencia magnética.

Además de estos colores principales, también existen los Gran Daneses de color manteca y los merle. Los perros de color manteca tienen un pelaje en tonos crema o beige, creando una apariencia suave y cálida. Por otro lado, los perros merle exhiben un patrón de manchas claras y oscuras en todo su pelaje, creando un aspecto marmóreo y distintivo. El color de base en los merles puede variar, desde negro hasta azul o incluso atigrado.

Es importante tener en cuenta que, independientemente del color o patrón de pelaje que presente un Gran Danés, la calidad y salud general del pelaje son aspectos cruciales a considerar. Un pelaje brillante, suave y bien cuidado es un reflejo de una buena nutrición y cuidado adecuado del perro.

Peso del Gran Danés

En promedio, los machos adultos de Gran Danés pueden pesar entre 54 y 90 kilogramos, mientras que las hembras suelen ser ligeramente más pequeñas, con un peso que oscila entre los 45 y 68 kilogramos. Estas cifras pueden variar dependiendo de la genética individual y otros factores como la alimentación y el nivel de actividad.

Desde una edad temprana es que los cachorros de Gran Danés comienzan a crecer rápidamente. Durante los primeros meses de vida, pueden ganar varios kilogramos cada semana. El crecimiento acelerado de estos perros es notable y puede ser sorprendente para quienes no están familiarizados con la raza. Sin embargo, es importante tener en cuenta que el crecimiento rápido debe ser supervisado cuidadosamente para asegurar un desarrollo saludable.

Dicho eso, el peso adecuado de un Gran Danés es esencial para su bienestar general y su salud a largo plazo. Un peso excesivo o insuficiente puede tener un impacto negativo en su estructura ósea y en sus articulaciones. Es fundamental proporcionar una alimentación balanceada y adecuada a lo largo de su vida, para mantener un peso saludable y prevenir problemas asociados con el sobrepeso o la falta de peso.

El peso de los especímenes de esta raza también puede variar según su género. Los machos tienden a ser más grandes y pesados que las hembras, aunque hay excepciones en ambos casos. Sin embargo, independientemente del género, sigue siendo fundamental controlar el peso de los perros de esta raza para evitar problemas de salud relacionados con el exceso de peso, como el estrés en las articulaciones o la obesidad.

Además, es importante tener en cuenta que el Gran Danés es un perro de rápido crecimiento, pero su desarrollo completo puede llevar tiempo. Estos caninos pueden seguir creciendo y desarrollándose hasta aproximadamente los 2 o 3 años de edad. Durante este período, es esencial proporcionarles una nutrición adecuada y un cuidado óptimo para garantizar un desarrollo saludable y equilibrado.

A medida que los Gran Daneses alcanzan su peso adulto, y al ser una raza de gran tamaño, los Gran Daneses pueden ser más susceptibles a condiciones como la displasia de cadera o problemas cardíacos, por lo que mantener un peso óptimo es crucial para minimizar el estrés en sus cuerpos y articulaciones.

Altura del Gran Danés

En promedio, los machos adultos de Gran Danés tienen una altura de hombro que oscila entre los 76 y 86 centímetros, mientras que las hembras suelen ser ligeramente más pequeñas, con una altura de hombro de alrededor de 71 a 81 centímetros. Estas cifras pueden variar dependiendo de la genética individual y otros factores.

Desde una edad temprana, los cachorros de Gran Danés, pueden crecer varios centímetros cada semana, alcanzando rápidamente una altura considerable. Durante su fase de crecimiento, es importante proporcionarles una alimentación equilibrada y adecuada, así como un cuidado adecuado para asegurar un desarrollo saludable de sus huesos y músculos.

El tamaño y la altura también pueden variar según su género. Los machos suelen ser más altos y grandes que las hembras, aunque siempre hay excepciones individuales. Sin embargo, independientemente del género, es fundamental monitorear de cerca el crecimiento y la altura de los perros de esta raza para asegurarse de que estén creciendo adecuadamente sin desviaciones.

Además de su altura, la estructura corporal y la postura del Gran Danés también son elementos importantes a tener en cuenta. Estos perros deben tener una estructura ósea sólida y bien proporcionada para mantener su equilibrio y movilidad. Una buena postura y una alineación adecuada de las extremidades son fundamentales para evitar problemas de salud como la displasia de cadera o la tensión en las articulaciones.

Por último, resta mencionar que la altura de esta raza contribuye a su apariencia imponente y a su presencia dominante. Es importante destacar que, si bien pueden parecer intimidantes debido a su tamaño, son conocidos por su temperamento amigable y gentil. Son perros leales y afectuosos que pueden ser excelentes compañeros para las familias si se les proporciona el cuidado y la socialización adecuados.

Cuerpo del Gran Danés

El cuerpo del Gran Danés es largo y bien proporcionado. La espalda es recta y fuerte, con una línea superior nivelada. El lomo es amplio y musculoso, con una ligera inclinación hacia la grupa. La grupa es ancha y ligeramente inclinada, dando lugar a una cola larga que alcanza hasta el corvejón. En reposo, la cola cuelga hacia abajo, pero cuando el perro está emocionado o en movimiento, se levanta en una ligera curva hacia arriba. La piel es suave y ajustada al cuerpo, sin formar pliegues ni arrugas excesivas. El pelaje es corto y liso, lo que facilita su cuidado y mantenimiento.

Los miembros delanteros son rectos y fuertes, con huesos largos y bien desarrollados. Los hombros están bien angulados, lo que permite una movilidad suave y elegante. Los codos están cerca del cuerpo y los pies son redondos y compactos, con dedos bien arqueados y almohadillas duras.

Los miembros traseros son musculosos y bien desarrollados. Los muslos son anchos y fuertes, lo que proporciona la potencia necesaria para los movimientos ágiles y poderosos. Los corvejones están bien angulados y colocados en paralelo, lo que contribuye a la eficiencia del impulso al caminar o correr.

Es importante destacar que, debido a su gran tamaño y estructura ósea, el Gran Danés puede ser susceptible a ciertos problemas de salud, como la displasia de cadera o la torsión gástrica. Por esta razón, es fundamental brindarles una nutrición adecuada, controlar su peso y proporcionarles ejercicio regular para fortalecer su musculatura y mantener su salud en óptimas condiciones.

Cabeza del Gran Danés

Comencemos por el cráneo, que es ancho y plano. La parte superior de la cabeza es plana y se ensancha gradualmente hacia los lados, formando un arco suave. El cráneo está bien desarrollado y tiene suficiente espacio para albergar un cerebro de tamaño adecuado.

El hocico del Gran Danés es largo y fuerte. Es recto y poderoso, sin ser puntiagudo ni redondeado. La longitud del hocico debe ser aproximadamente igual a la del cráneo. La mandíbula es fuerte y musculosa, capaz de ejercer una mordida poderosa. Los labios son gruesos y bien adheridos, cubriendo los dientes.

El cráneo y el hocico están separados por una línea bien definida llamada stop. El stop es suave y no debe ser abrupto. Esta característica da una apariencia distintiva a la cabeza del Gran Danés y contribuye a su expresión noble y amable.

Los ojos del Gran Danés son de tamaño mediano y tienen forma almendrada. Tienen una expresión amable y alerta. Los ojos suelen ser oscuros, aunque también se aceptan colores más claros dependiendo del tono del pelaje. La mirada del Gran Danés es serena y muestra inteligencia y nobleza.

Las orejas del Gran Danés son de tamaño mediano y se llevan erguidas o dobladas hacia adelante. En algunos países, la práctica del corte de orejas es común y se realiza para que se mantengan erguidas. Sin embargo, en muchos lugares se prefiere mantener las orejas en su forma natural, sin intervención. Las orejas naturales suelen ser de forma triangular y caen hacia los lados de la cabeza.

El Gran Danés también presenta, al igual que en su cuerpo, una piel suave y ajustada alrededor de la cabeza. No debe haber arrugas ni pliegues excesivos en la piel. Esto resalta la estructura ósea y muscular de la cabeza, brindando una apariencia más elegante y estilizada.

Es importante mencionar que la cabeza del Gran Danés, debido a su tamaño y estructura, requiere un cuidado adecuado. Se recomienda limpiar regularmente los ojos y los pliegues faciales para prevenir infecciones o irritaciones.

Mordida del Gran Danés

La mordida de un perro se refiere a cómo se alinean y encuentran los dientes superiores e inferiores al cerrar la boca. En el caso del Gran Danés, su mordida es conocida como “mordida en tijera”, lo que significa que los incisivos superiores encajan justo delante de los incisivos inferiores cuando cierra la boca.

En cuanto a la fuerza de mordida del Gran Danés, es difícil proporcionar una medición exacta, ya que hay muchos factores que influyen en la fuerza de mordida de un perro, como el tamaño de la mandíbula, la musculatura de la cabeza y el estado de los dientes. Sin embargo, se estima que la fuerza de mordida promedio de un Gran Danés oscila entre 200 y 400 psi (libras por pulgada cuadrada).

Para poner en perspectiva esta cifra, es importante compararla con otras razas de perros. Por ejemplo, el Pitbull es conocido por tener una fuerza de mordida de alrededor de 235 psi, mientras que el Rottweiler alcanza aproximadamente 328 psi. Estos números son solo estimaciones y pueden variar dependiendo de cada individuo, pero nos dan una idea general de la fuerza de mordida del Gran Danés en relación con otras razas.

Es importante tener en cuenta que la fuerza de mordida no es el único factor a considerar al evaluar la “peligrosidad” de un perro, ya que no siempre está relacionada con el temperamento o el comportamiento de un perro. Los Gran Daneses son conocidos por su temperamento amigable y gentil, y no son considerados una raza agresiva en general.

En relación con la mordida, al igual que con cualquier raza, es necesario mantener una higiene bucal regular, como cepillar los dientes y realizar chequeos dentales periódicos. Esto ayuda a prevenir enfermedades periodontales y otros problemas dentales que podrían afectar la mordida y la salud general del perro.

Fases de crecimiento del Gran Danés

Cada etapa tiene características distintas en términos de tamaño, desarrollo físico y comportamiento. A continuación, describiré las tres principales fases de crecimiento del Gran Danés: cachorro, adolescente y adulto.

  1. Cachorro: Esta es la primera etapa de crecimiento del Gran Danés, que abarca desde su nacimiento hasta aproximadamente los 12 meses de edad. Al nacer, los cachorros son pequeños y dependen completamente de su madre para alimentarse y mantenerse calientes. Durante las primeras semanas de vida, crecerán rápidamente y comenzarán a explorar su entorno. Durante esta fase, los cachorros son adorables y juguetones. Su cuerpo comienza a desarrollarse rápidamente, especialmente en términos de aumento de peso y tamaño. Durante los primeros meses, es importante proporcionarles una alimentación adecuada y equilibrada para apoyar su crecimiento saludable. También es esencial socializarlos y comenzar su entrenamiento básico para establecer bases sólidas de comportamiento.
  1. Adolescente: A medida que los cachorros de Gran Danés se acercan al año de edad, ingresan en la etapa de la adolescencia. Esta etapa generalmente se extiende hasta los 18 meses aproximadamente. Durante este período, el Gran Danés experimenta un rápido desarrollo físico y puede parecer desgarbado debido a su crecimiento desigual. Durante la adolescencia, los huesos y las articulaciones se están fortaleciendo y desarrollando. Es importante tener especial cuidado con su alimentación y ejercicio, para evitar lesiones o problemas en el desarrollo óseo. Se recomienda proporcionar una dieta equilibrada y controlar su crecimiento para evitar un aumento de peso excesivo. En cuanto al comportamiento, los Gran Daneses adolescentes pueden volverse más testarudos y desafiantes. Es fundamental mantener una disciplina constante y continuar con su entrenamiento, estableciendo límites claros y reforzando las buenas conductas. La socialización también es crucial en esta etapa, ya que les ayuda a relacionarse de manera adecuada con otros perros y personas.
  1. Adulto: Aproximadamente a los 18 meses, el canino entra en la fase adulta. En esta etapa, la mayoría de los perros alcanzan su tamaño y peso máximo. Los machos suelen ser más grandes que las hembras y pueden continuar desarrollándose en términos de musculatura hasta los 2 o 3 años. Como adulto, el Gran Danés muestra su impresionante tamaño y presencia. Su crecimiento se ha estabilizado y su cuerpo ha adquirido la estructura y la musculatura características de la raza. Es importante proporcionarles una alimentación adecuada para mantener un peso saludable y evitar problemas de sobrepeso. En términos de comportamiento, los adultos suelen ser tranquilos y afectuosos. Son leales y cariñosos con sus familias, pero también pueden mostrar un carácter protector. El entrenamiento continúa siendo importante para mantener su obediencia y establecer una buena relación de liderazgo.

Alimentación del Gran Danés

Aquí hay algunas pautas generales para la alimentación del Gran Danés:

  1. Alimentación de cachorros: Durante la fase de cachorro, es esencial ofrecer una alimentación diseñada específicamente para cachorros grandes y gigantes. Estas dietas están formuladas para satisfacer las necesidades de crecimiento rápido y óseo de los cachorros de Gran Danés. Por lo general, contienen un equilibrio adecuado de proteínas de alta calidad, grasas saludables, vitaminas y minerales.
  2. Frecuencia de las comidas: Los cachorros de Gran Danés requieren comidas frecuentes para satisfacer sus altas necesidades calóricas y nutricionales. Se recomienda ofrecerles de 3 a 4 comidas al día durante los primeros meses. A medida que crecen, se puede reducir gradualmente la frecuencia de las comidas a 2 veces al día.
  3. Control del crecimiento: Debido a su rápido crecimiento, es importante controlar el peso de los cachorros para evitar un crecimiento excesivo. El sobrepeso puede ejercer presión adicional sobre sus huesos y articulaciones en desarrollo, lo que puede aumentar el riesgo de problemas de salud. Trabaja en estrecha colaboración con tu veterinario para determinar la cantidad adecuada de alimento y realizar ajustes según sea necesario.
  4. Alimentación de adultos: Una vez que el perro alcanza la etapa adulta, su dieta puede cambiar a una fórmula de alimento para perros adultos de razas grandes o gigantes. Estas dietas están diseñadas para mantener su salud y proporcionar los nutrientes necesarios para su nivel de actividad. Asegúrate de elegir un alimento de alta calidad que contenga proteínas, grasas saludables y una cantidad equilibrada de carbohidratos, vitaminas y minerales.
  5. Control de las raciones: Es importante controlar las raciones y evitar la sobrealimentación en los adultos. La obesidad puede ser especialmente perjudicial para esta raza debido a su tamaño y predisposición a problemas articulares. Sigue las recomendaciones del fabricante del alimento para determinar las porciones adecuadas y ajusta según las necesidades individuales de tu perro, incluyendo su nivel de actividad y metabolismo.

Recuerda que cada perro es único, y las necesidades dietéticas pueden variar según factores como la edad, el nivel de actividad y la salud en general.

Educación del Gran Danés

Aunque cada perro es único y puede tener diferentes niveles de energía y temperamento, hay algunas pautas específicas que pueden aplicarse a la educación de esta raza en particular:

  1. Comience temprano: Es importante comenzar la educación desde una edad temprana, idealmente cuando es aún cachorro. Los primeros meses son fundamentales para establecer las bases de su comportamiento y socialización. Introduzca gradualmente al cachorro a diferentes situaciones, sonidos, personas y otros animales para que se sienta cómodo en diversos entornos.
  2. Socialización adecuada: La socialización temprana es crucial, ya que son perros grandes y poderosos. Exponga al cachorro a diferentes personas, perros y ambientes para ayudarlo a desarrollar habilidades de socialización positivas. Organice encuentros controlados con otros perros y asegúrese de que los encuentros sean positivos y agradables.
  3. Reforzamiento positivo: El Gran Danés responde muy bien al refuerzo positivo durante el proceso de educación. Utilice recompensas como golosinas, elogios y caricias para reforzar los comportamientos deseados. Evite el uso de castigos físicos o gritos, ya que esto puede tener efectos negativos en su confianza y bienestar.
  4. Establecer límites claros: Aunque la raza es conocida por su naturaleza tranquila y amigable, es importante establecer límites claros desde el principio. Esto incluye enseñarle comandos básicos como “sentarse”, “quedarse” y “venir”. Estos comandos no solo ayudarán a mantener un control adecuado, sino que también fortalecerán su vínculo y confianza mutua.
  5. Entrenamiento de obediencia: El Gran Danés puede ser un perro obediente si se le brinda el entrenamiento adecuado. Involúcrelo en sesiones regulares de entrenamiento de obediencia, utilizando métodos basados en refuerzo positivo. Establezca una rutina de entrenamiento consistente y mantenga las sesiones cortas y divertidas para mantener su interés.
  6. Ejercicio adecuado: A pesar de su tamaño, el Gran Danés no es un perro extremadamente activo. Sin embargo, aún requieren ejercicio diario para mantener su salud física y mental. Asegúrese de proporcionar caminatas regulares y tiempo para jugar. Evite el ejercicio intenso o de alto impacto mientras el perro es joven para proteger sus articulaciones en crecimiento.
  7. Paciencia y consistencia: La educación requiere paciencia y consistencia por parte del propietario. Es posible que no aprendan tan rápidamente como algunas razas más ágiles, pero con tiempo y esfuerzo, pueden lograr un alto nivel de obediencia.

Consideraciones Finales

En conclusión, el Gran Danés es una raza de perro impresionante y majestuosa que tiene características distintivas que lo hacen único. Su tamaño imponente y elegante presencia lo convierten en una raza llamativa, mientras que su naturaleza amigable y afectuosa los convierte en compañeros leales y cariñosos para sus familias.

En general, la raza es increíblemente especial y gratificante para aquellos que están dispuestos a dedicarles tiempo, atención y amor, por lo que, si estás considerando agregar un Gran Danés a tu familia, asegúrate de estar preparado para satisfacer sus necesidades específicas, como su tamaño, ejercicio adecuado y atención veterinaria regular.

Con el cuidado adecuado, este tipo de caninos pueden florecer y brindarte años de alegría y compañía incondicional.